martes, 13 de enero de 2009

Vida

Necesitó escuchar el canto de los pájaros para saberse libre. Y sentir el viento en el rostro, para sentirse ave.

Necesitó ser libre como las aves, para sentirse vivo. Y una vez que se sintió vivo, necesitó amar para seguir siéndolo.

2 comentarios:

Charly T. dijo...

Lili, maravilloso juego de palabras para una realidad absoluta.

Anónimo dijo...

Estupenda tu escritura. Afectaron mi sentir. Complacida con tus palabras!!